COMER Y BEBER

LA EXQUISITA RUTA DEL BUEN SABOR



En Andrade Marín, localidad que se encuentra ubicada exactamente a veinte minutos de la ciudad de Ibarra y que al  igual que en cada parroquia, en este sitio se suele preparar la ponderada fritada. 
Este mencionado plato solo se lo vende los días viernes y sábados; dicha venta se realiza en el mercado de la localidad ubicado en la calle General Enríquez en dirección ascendente desde la autovía. Un platillo que, según comentan muchos de los turistas o los propios habitantes del sector, quedan para chuparse los dedos. 

Esta es una de las comidas típicas no solo en nuestra provincia, sino también a nivel nacional. En una casa cercana al mercado de esta localidad, suele realizarse la limpieza y corte del animal, para luego proceder a la preparación de la fritada, platillo típico de las localidades. 

Después de la limpieza y separación del animal, se procede a pesar, limpiar y guardar las partes restantes del mismo, como sus patas y su cuerpo, para ser usado en la elaboración de otros, tales como el caldo de patas. En el mismo lugar donde se realiza la preparación del animal, poseen un cuarto donde guardan una tradicional paila que sirve para freír al cerdo en su propia grasa.

PIE DE FOTO 1: La fritada un plato típico de la sierra.
PIE DE FOTO 2: Preparación de hornado.

  
FRITADAS MAMA MICHE



Las fritadas de Mama Miche es otro gran exponente que se ofrece en la localidad de Atuntaqui. Su único sabor y esencia hace que este plato sea inigualable en su especie. Es así que Fritadas Amazonas es el punto gastronómico con mayor tradición de Atuntaqui. 

Este negocio es propiedad de Humberto Lima , quien lo expandió  hace cuatro años y construyó dos locales adicionales, uno en la vía Panamericana, a cinco  minutos de Ibarra, y otro en Quito, en las calles Eloy Alfaro y De Los Mortiños. “Las fritadas  comenzaron hace 50 años cuando mi abuela (Mama Miche) las preparaba”, comentó Lima, quien asegura que sus secretos son: la sazón, el aseo (en la preparación) y la rápida atención a los clientes. 


“Mama Miche” recibe todos los días un promedio de 150 personas, gracias a su rica realización, que es hecha en paila. “Siempre vengo aquí porque nadie más prepara la fritada con leña, es deliciosa”, dijo Aníbal Ojeda, visitante continuo del local de Atuntaqui hace 15 años.

Aunque no lleva mucho tiempo dedicada a la venta de fritada, la experiencia en el negocio le han dejado la satisfacción de poder ofrecer a su clientela un plato típico de su región con el toque de sabor que sus familiares le inculcaron desde pequeña. 

Para dar cabida a sus clientes, entre los tres locales emplean a 60 personas. Quienes atienden al público visten el atuendo tradicional de Imbabura: blusa bordada, anaco y alpargatas.

PIE DE FOTO 1: Local fritadas de "Mama Miche". 
PIE DE FOTO 2: En este local las fritadas se sirven con amabilidad.

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